San José, esposo de la Virgen María
SOLEMNIDAD DE SAN JOSÉ, ESPOSO DE LA BIENAVENTURADA
VIRGEN MARÍA
Papa Francisco: Recuerdo a una persona que quiero mucho, y que es y ha sido muy importante a lo largo de mi ida. Ha sido sostén y fuente de inspiración. Es a él a quien recurro cuando estoy medio «apretado»: es san José. En la vida de José hubo situaciones difíciles de enfrentar. Me imagino a José con su esposa a punto de tener a su hijo, sin un techo, sin una casa, sin alojamiento. José era un hombre que se hizo preguntas, pero, sobre todo, era un hombre de fe. Y fue la fe lo que le permitió a José poder encontrar luz en ese momento que parecía todo a oscuras; fue la fe lo que lo sostuvo en las dificultades (24-9-2015).
PRIMERA LECTURA
Lectura del segundo libro de Samuel 7, 4-5a. 12-14a. 16
En aquellos días, recibió Natán la siguiente palabra del Señor: —«Ve y dile a mi siervo David: "Esto dice el Señor: Cuando tus días se hayan cumplido y te acuestes con tus padres, afirmaré después de ti la descendencia que saldrá de tus entrañas, y consolidaré su realeza. Él construirá una casa para mi nombre, y yo consolidaré el trono de su realeza para siempre. Yo seré para él padre, y él será para mí hijo. Tu casa y tu reino durarán por siempre en mi presencia; tu trono permanecerá por siempre"».